11.11.19

No perder lo bueno, hacerlo parecido

(Acerca del acuerdo firmado por la coalición multicolor).

Fortalecer.
De fortaleza.
1. tr. Hacer más fuerte o vigoroso. U. t. c. prnl.
2. tr. desus. Confirmar, corroborar. Fortalecer un argumento, una razón.

Crear.
Del lat. creāre.
1. tr. Producir algo de la nada. Dios creó cielos y tierra.
2. tr. Establecer, fundar, introducir por vez primera algo; hacerlo nacer o darle vida, en sentido figurado. Crear una industria, un género literario, un sistema filosófico, un orden político, necesidades, derechos, abusos.



Fortalecer y crear son dos verbos que aparecen a lo largo del documento firmado por la coalición partidaria de blancos, colorados, independentistas, cabildantes y del partido de la gente, bajo el nombre de “Compromiso por el país”.
El documento cuenta con trece puntos, entre los que se encuentran los de salud, educación, seguridad ciudadana y estado inteligente, entre otros. El análisis que me propongo realizar consiste en ver cuántas veces y en qué contextos aparece un verbo u otro.
Es así que “fortalecer” cuenta con 18 entradas a lo largo de todo el documento, repartidas en siete puntos de los 13 que aparecen mencionados en el citado texto. “Crear”, por su parte, cuenta con ocho menciones distribuidas en seis de las 13 secciones.
En principio, resulta curioso que un acuerdo de gobierno que involucra a tantas fuerzas políticas distintas –y por ende, a tantas “cabezas pensantes”– incluya tan pocos puntos de cambio sustantivos. Por lo contrario, parece apuntar mucho más a reforzar aquello ya existente.
Como decía la campaña del partido de gobierno: “no perder lo bueno, hacerlo mejor”.
Más notable aún es que en el apartado que refiere a la educación, bajo el rótulo de “Transformar la educación”, no se encuentre ni una sola referencia léxica a “crear”, mientras que “fortalecer” aparece en seis de los 14 ítems del apartado.
Aparentemente, si nos basamos en el discurso habitual de la oposición, la educación es pasible de la mayor de las transformaciones, está a la deriva, en estado de emergencia, y condiciona el futuro de nuestros jóvenes. No obstante, en la redacción del documento que incluye como cometido esencial llevar a cabo la revolución educativa, no se encuentran medidas de transformación educativa, a excepción de la reformulación de los estatutos docentes y no docentes (reformulación que dice respetar los derechos adquiridos por los funcionarios, aunque de un modo no del todo claro).
Un programa que apunta al cambio pero mantiene más de lo que cambia, puede querernos decir dos cosas: o bien ese programa no es tan revolucionario como aparenta, o –después de todo– no se ha hecho todo tan mal.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario